La mayoría de conductores no prestan atención a algo tan básico porque piensan que no puede afectar en exceso del coche a largo plazo. Los 3 principales problemas de dejar el coche al sol son los siguientes:
1- La pintura de la carrocería se desgasta mucho, y queda sin brillo y el color original. Por lo tanto, se puede decir que un coche al sol aparenta ser mucho más viejo de lo que en realidad es. Esto, además de la obvia afectación a su estética, también repercute en su valor.
2- Asimismo, al evitar problemas con el coche al sol, lograrás mantener sus faros y pilotos traseros en las mejores condiciones posibles. Ten en cuenta que pierden brillo y efectividad y, aparte, se pueden secar. Esto provoca que se cuele agua en el interior y se puedan dañar.3
3- Se desgastan elementos de su interior, como el volante o la tapicería.
Es indispensable que apliques algunos consejos básicos que te damos a continuación para evitar problemas con el coche al sol.
Consejos para proteger el coche del sol
Las fundas son grandes aliadas para evitar problemas con el coche al sol, tanto si está expuesto directamente como en la sombra. Son especialmente útiles si va a estar varias horas a la intemperie, aunque hay que reconocer que su uso recurrente puede ser muy incómodo.
1. Aparcar en la sombra
Este es probablemente el truco más obvio, pero también el más efectivo. Siempre que sea posible, trata de aparcar tu coche en un lugar con sombra. Si no hay árboles o edificios cercanos, puedes utilizar un parasol o una lona para crear tu propia sombra. Recuerda que la sombra también se mueve a lo largo del día, por lo que tendrás que ajustar la posición de tu coche para mantenerlo protegido.
2. Utilizar un protector de parabrisas
Además de aparcar en la sombra, puedes utilizar un protector de parabrisas para evitar que los rayos del Sol calienten el interior de tu coche. Estos protectores se colocan en la parte delantera del coche cuando está aparcado y reflejan los rayos UV. También son útiles para evitar que el salpicadero y otros elementos del interior del coche se decoloren debido a la exposición al Sol.
3. Limpia y encera regularmente tu coche
La pintura de tu coche es una de las primeras cosas que puede dañar el Sol. La exposición prolongada a los rayos UV puede hacer que la pintura se decolore o se agriete. Para proteger la pintura de tu coche, es importante limpiarlo y encerarlo regularmente. La cera crea una capa protectora sobre la pintura que refleja los rayos del Sol y evita que se dañe.
4. Instalar ventanas polarizadas
Las ventanas polarizadas pueden ser más caras que las normales, pero son una excelente manera de proteger tu coche del Sol. Estas ventanas reducen la cantidad de rayos UV que entran en el coche y también reducen el calor interior. Además, las ventanas polarizadas pueden ser útiles para reducir el deslumbramiento y mejorar la visibilidad.
5. Utilizar un sistema de enfriamiento del coche
Si vives en un clima especialmente cálido, un sistema de enfriamiento del coche puede ser una buena inversión. Estos sistemas utilizan un ventilador y un tanque de agua para reducir la temperatura del aire que entra en el coche. También pueden ser útiles para reducir la humedad en el interior del coche.
En resumen, existen varias formas sencillas de proteger tu coche del Sol. Aparcar en la sombra, utilizar un protector de parabrisas, limpiar y encerar regularmente tu coche, instalar ventanas polarizadas y utilizar un sistema de enfriamiento del coche son algunas de las mejores maneras de mantener tu coche fresco y protegido. Recuerda que el sol puede ser un enemigo implacable para la pintura y el interior de tu coche, por lo que es importante tomar medidas para protegerlo.